Musica durante el embarazo

Quien no se ha visto alguna vez en la necesidad de tener que escuchar música para subir los ánimos, o poner una canción melancólica que acompaña a una situación personal de tristeza,..., son ejemplos del uso de la música. Normalmente tendemos a poner un estilo de música que coincida con nuestro estado anímico y sin embargo no utilizamos la música para guiar nuestro humos, así cuando nos encontramos tristes por algún motivo, una canción animada puede ayudarnos a ver el mundo desde otra perspectiva.

Estas variaciones también las percibe el feto dentro del útero materno. La música crea cambios en nuestro ánimo gracias a la secreción de endorfinas y estas afectan también a otros órganos, como al corazón; así cuando escuchamos una canción con marcha, suele acompañarse de una subida de las pulsaciones y viceversa. Tanto lo que nos hace sentir una melodía como la secreción de las endorfinas y acompañado de las vibraciones causadas por las ondas sonoras, son transmitidas al feto desde la semana18-20 de gestación.

Recomiendo el uso de la música desde el principio de la gestación. Siempre hemos escuchado que es importante estar tranquila durante la gestación, no tener sobresaltos innecesarios, que nos cuiden mucho para que el futuro miembro de la familia, al cual estamos desarrollando, sea lo más sano posible. Por ello, que mejor forma que aprender a usar la música para que nos ayude a encontrarnos en ese estado.

Pero, ¡cuidado!, escuchar música no significa que sea obligatoriamente música clásica, ya que seguramente existan personas a las que dicha música les creen hasta un poco de ansiedad porque no les gusta. Lo importante es elegir una música que nos guste y que sea adecuada para transmitirnos sensaciones agradables como serenidad, felicidad, pasión,... Aunque tampoco os recomiendo que os pongais a todo volumen la música que suena en las discotecas, por mucho que podamos decir que siempre nos ániman dichas canciones, ya que el grado de "subidón" que crean no es beneficioso sentirlo frecuentemente, esto puede transmitir al feto un estado de estrés.

En definitiva, podemos concluir que el uso de la música siempre va a ser beneficioso para todos las situaciones de nuestra vida pero, concretando en el embarazo, podemos decir que no solo es beneficioso para nosotras sino también para el pequeñajo/a que vamos a tener.